Vuelvo otra vez con uno de esos tutoriales que escribo ya no solo para vosotros, mis queridos lectores, sino con idea de pasárselos a mis clientes agilizando el proceso, y no teniendo una y otra vez que explicar lo mismo.
Artículos como el de cómo crear campañas publicitarias con Facebook Ads o el de cómo configurar el seguimiento de conversiones en Google Tag Manager, que ambas plataformas son complejas de narices, más si no tienes experiencia con ellas.
Será por tanto un artículo puramente didáctico y muy esquemático, que la idea no es soltar todo el royo por aquí sino ir precisamente al grano.
¡Vamos a ello!
Índice de contenido
Cómo se debería trabajar con TODOS los clientes
Empiezo por lo obvio, que pese a serlo, creo que merece una pequeña explicación inicial ya que en todos estos años me he encontrado con compañeros de la industria de todo.
Desde aquellos que gestionan todo de sus clientes desde sus cuentas personales, pasando por los que secuestran las cuentas de sus clientes para retenerlos.
La cuestión, y esto ya lo cuento por aquí como aviso para cualquiera que vaya a contratar a un programador o una agencia de marketing, es que EN TODO MOMENTO EL CLIENTE DEBERÍA TENER EL CONTROL DE LAS CUENTAS A LAS QUE EL GESTOR TIENE ACCESO.
Lo he puesto en negrita y en mayúscula para que quede claro:
- Si alguien te crea una web, tanto el dominio como el hosting, como por supuesto el propio acceso al panel de administración de la web, tiene que estar a tu nombre, y tú tener acceso a la gestión de las tres herramientas. Luego a lo mejor no lo vas a utilizar en la vida (para eso has contratado a un gestor), pero oye, tú has pagado por ello y eres tú el dueño, no la agencia de marketing o de desarrollo.
- Si alguien te crea perfiles sociales para gestionar tu negocio, tú tienes que tener los permisos de administración en esos perfiles. No el gestor (que también, o al menos los permisos que necesite para gestionar las cuentas), tú.
- Y por último, si alguien te crea una cuenta en alguna herramienta como Google Analytics, Search Console o MyBusiness, pues exactamente lo mismo.
Ya no solo por puro sentido común (si esa cuenta el día de mañana incumple alguna normativa penal, el administrador es el que paga el pato, estés o no gestionándola ya), sino además porque hay una cosa llamada RGPD que hay que cumplir.
Así que dicho esto, en PabloYglesias cada vez que empezamos a trabajar con un nuevo cliente, creamos una cuenta de Chrome específica en la que asociamos absolutamente todos los acceso a servicios y herramientas que requiere la gestión de este proyecto.
- Los acceso al hosting y la web.
- Los acceso a los perfiles sociales.
- Los accesos al resto de herramientas.
Y lo primero que hacemos nada más crearla es pasarle al cliente el usuario y la contraseña. Lo quiera o no. De esta manera, si el día de mañana no está contento con nuestro trabajo, simplemente nos cambia la contraseña y nos avisa de que dejamos de trabajar juntos, y listo.
Y por mi parte, me evito el problema que ocasionaría el que, por ejemplo, me hackearan el dispositivo y ya no solo corrompiera mi presencia digital, sino también la del resto de mis clientes.
Fácil, sencillo, para todos los gustos. Es norma de la casa, y no concibo hacerlo de otra manera.
Dar acceso a un tercero a nuestra cuenta de Google Analytics
Uno de los pasos más habituales cuando gestionamos un proyecto digital es tener acceso a la cuenta de Google Analytics. De ahí es de donde en primera instancia sacamos los datos para preparar la estrategia.
Algunas veces la creamos nosotros mismos de cero desde la cuenta de Chrome antes mencionada y le damos acceso al cliente, pero hay proyectos que llegan a nuestras manos heredados de terceros y que por tanto ya tienen Analytics creado.
En ese caso, nosotros lo que intentamos hacer con nuestros clientes es que sean ellos mismos quienes nos inviten a nosotros (a la cuenta creada específicamente para gestionar ese proyecto), por eso de que no nos tengan que dar sus propios credenciales de acceso.
Y los pasos a seguir serían los siguientes:
- Entras en la cuenta: https://analytics.google.com/
- En el menú lateral, abajo del todo, le das a Administrar.
- En la sección de cuentas > Gestión de usuarios de cuenta.
- En la nueva pestaña, le das al botón «+» > Añadir usuario.
- Pones el correo creado para ese proyecto y le das todos los permisos (no hace falta el de gestionar otros usuarios).
Dar acceso a un tercero a nuestra cuenta de Search Console.
Si el proyecto tiene una web, además de Google Analytics vamos a necesitar también Search Console. Nosotros en la agencia se lo ponemos a absolutamente todos los proyectos de desarrollo web, lo vayan a utilizar o no, pero claramente si el proyecto en algún momento tiene que gestionar el posicionamiento SEO, lo necesita tener activo sí o sí.
Y ya me dirás, hoy en día, que proyecto web no depende, aunque sea mínimamente, del posicionamiento…
Por ello, mejor hacerlo desde el principio que meternos a ello cuando ya sea necesario, teniendo entonces que esperar a que Google almacene suficiente información de nuestro dominio como para que podamos empezar a trabajar sobre la arquitectura de la web o el linkbuilding con datos y no chupando un dedo y alzándolo a ver por dónde sopla más viento.
Pero si el proyecto ya tiene una cuenta creada, lo suyo es que nos de acceso a la misma. Y para ello basta con que el cliente siga estos pasos:
- Entras en la cuenta: https://search.google.com/
- En el menú lateral, abajo del todo, le das a Ajustes.
- Pinchas en Usuarios y Permisos.
- Pinchas en el botón de «Añadir Usuario».
- Pones el correo y de permisos, «Completo», que es el que viene por defecto.
Dar acceso a un tercero a nuestra cuenta de Google My Business
Para que nos entendamos, Google My Business es la información que te aparece de un local cuando pinchas sobre ese local en Google Maps o haces una búsqueda en Google.
Es decir, la tarjeta esa donde lees reseñas de terceros antes de entrar en un restaurante o elegir un barbero o un hotel al que ir.
Por tanto hablamos de un servicio de Google IMPORTANTÍSIMO para cualquier negocio que tenga al menos un local físico. Y para colmo gratuito (como los dos anteriores).
Como decía anteriormente, si el proyecto que gestionamos no tiene perfil en Google My Business, nosotros se lo creamos y lo optimizamos para que se posicione por encima de la competencia local que tenga. Pero si el cliente ya lo tenía, tiene que darnos acceso.
Y esto se hace de la siguiente forma:
- Entras en la cuenta: https://business.google.com/
- En el menú lateral, Usuarios.
- Clicamos en «Añadir Usuario».
- Pones el correo y de funciones, «Administrador».
En fin, que como prometí un artículo rápido y al grano para facilitarle la vida a mis clientes, y probablemente a unos cuantos de los lectores.
Y espero que además este tipo de artículos sintéticos sirvan a alguno para que el día de mañana, a la hora de contratar a una agencia o un profesional, no le timen. Que hay mucho listillo en este sector, lamentablemente.
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