tiktok facebook

Tenía pendiente dedicar una pieza a la que fue la bomba informativa de la semana pasada: Meta, la empresa matriz de Facebook, WhatsApp, Instagram y compañía, pagó a Targeted Victory, una firma de consultoría republicana, para que esta se encargase de desprestigiar mediáticamente a TikTok (EN).


Vamos a ver cómo lo hizo, y las implicaciones que ello conlleva.

Sobre el caso en sí

Como decía, se han difundido varios emails del equipo de marketing de Facebook gestionando con su agencia de medios (Targeted Victory) campañas de desprestigio a la que es la red de los jóvenes del momento, TikTok.

Justo esa red que Facebook ha intentado comprar, y que no ha podido, suponiendo a día de hoy un verdadero quebradero de cabeza para la compañía de las redes sociales (controlan todas las más importantes… a excepción de justo la que más crecimiento está teniendo en, precisamente, el demográfico más importante para el futuro de la empresa, el de los jóvenes).

Así pues, la estrategia seguida por Meta y Targeted Victory era bien sencilla: Inundar los periódicos y medios locales de artículos y supuestas cartas al editor con historias y supuestos estudios que posicionaran a TikTok como una plataforma dañina para los jóvenes.

Con titulares del tipo:

Cómo TikTok se ha convertido en el espacio de redes sociales más dañino para los niños

Y con emails donde no dejaban margen de duda, aludiendo incluso al peligro para la Seguridad Nacional del país el que una empresa extranjera sea la más utilizada por los jóvenes (algo que, por cierto, ya ayudaron a fomentar sin pruebas en el gobierno de Donald Trump, generando esa guerra comercial como China que aún hoy seguimos experimentando):


[…] hay que transmitir el mensaje de que, si bien Meta es el saco de boxeo actual, TikTok es la verdadera amenaza, especialmente como una aplicación de propiedad extranjera que es la número 1 en el intercambio de datos que usan los jóvenes adolescentes.

Para ello, asociaban tendencias entre los jóvenes estadounidenses claramente nocivas con la red social de la competencia, asegurando que se habían iniciado en la misma.

Y se usaba para ello supuestos estudios y encuestas cuyas fuentes, casualmente, son desconocidas.

Una campaña de desprestigio que intenta precisamente trasladar la toxicidad que sabemos que existe (con estudios y encuestas reales) en las plataformas bajo el control de Facebook, a la plataforma de TikTok.

Como si esta fuera la única culpable.

Esta Meta (aka Facebook) perdida

Recordamos que, precisamente, Facebook acabó hace unos meses cambiando de nombre a Meta para alejarse de esa crisis reputacional que durante años han ido generando ellos mismos en base a numerosos casos y acciones más que reprochables.

Empezando, por supuesto, por su estrategia de crecimiento, que se basa en la compra de aquello que le hace sombra, o la copia descarada para asfixiar su negocio.


Es más, la propia Facebook como red social nació tras la copia de otra plataforma a la que Mark tuvo acceso en el poco tiempo que estuvo en la universidad, y esto se ha ido replicando a lo largo de la historia con la compra de WhatsApp, la compra de Instagram, el intento de compra de Snaptchat (hasta tres veces) y su posterior copia del formato Stories en todas y cada una de las marcas de Meta hasta que Snaptchat pasó al olvido, y el actual intento de compra de TikTok y su posterior copia de lo que le hace diferencial en los Reels de Instagram.

Y siguiendo por las numerosas ocasiones en las que Facebook, con sus acciones, ha generado un caldo de cultivo social altamente nocivo. Desde el caso Cambridge Analytica, en el que la compañía había permitido a una supuesta empresa de estadística acceder a los datos de millones de estadounidenses para fines puramente académicos… que se utilizaron para redirigir campañas políticas que llevaron a Donald Trump a la presidencia, o a que saliera el Sí al Brexit en Reino Unido, pasando por el interés en moderar algunos discursos (en detrimento de otros) del grueso de la sociedad, mientras permitía cualquier tipo de manipulación informativa en medios y personajes considerados VIP para la plataforma, hasta todos esos estudios que asocian tendencias terriblemente tóxicas en su red social como el auge del populismo y del terrorismo.

Lo más gracioso de todo es que el portavoz de Meta, Andy Stone, defendió la campaña diciendo:

“Creemos que todas las plataformas, incluido TikTok, deberían enfrentar un nivel de escrutinio consistente con su creciente éxito”.

Algo que a la vista de cómo ha gestionado a lo largo de los años Meta su imperio, parece que no están interesados en aplicar también a ellos mismos.

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Este tipo de estrategias, por otra parte, son lamentablemente muy habituales.

En CyberBrainers nos hemos enfrentado, y seguimos enfrentándonos a movimientos semejantes de la competencia con alguno de nuestros clientes, y conocemos de primera mano supuestas consultoras de reputación y de medios que no tienen ningún reparo en gestionar este tipo de actividades, que recordemos son ilegales, para sus clientes.

Por nuestra parte, cabe recordar que NO aceptamos ningún contrato cuyas acciones para minimizar el daño reputacional pasen por echar de la competencia. Cuando nos encontramos con situaciones como esta, enfocamos todos los recursos a desmentir y potenciar la imagen de marca, a sabiendas de que este es el camino que sabemos que funciona a medio/largo plazo.

Y ejemplo de ello es ese otro caso del que hablábamos por estos lares no hace mucho, en el que se hizo patente la necesidad de crear marcas blancas corporativas para controlar la reputación de la marca madre en el tercer entorno.

Una estrategia usada por estas supuestas agencias… y lamentablemente también por las que hacemos el trabajo de forma ética, y por la simple necesidad de luchar contra ellas en igualdad de oportunidades.