Escribo hoy en AtomBit.es (ES), blog de reciente creación sobre Software, Gadgets, Videojuegos, Ciencia, Crowdfunding, Cine y televisión del cual soy colaborador esporádico.


 

Ayer se presentaba el nuevo porvenir de Canonical, Ubuntu Edge (EN), enfocándose así en el mundo móvil, y atreviéndose a dar el paso al hardware.

PabloYglesias-ui

No entraré en detalles sobre las especificaciones técnicas, por lo que para los interesados os enlazo al artículo de Yubal F.M. (ES), pero sí quería hacerme eco de algunas para comprender la foto general del proyecto:

  • 4GB de RAM y 128GB de SSD: Sobre el procesador solo se ha dicho que será multicore de última generación, aunque a la vista de lo anterior, promete potencia, y mucha. Entramos así en un panorama en el que la potencia de un escritorio puede llegar a ser inferior a la de un smartphone.
  • Batería de ánodo de silicio de larga duración: Una tecnología que aún no ha llegado al mercado, y que promete una mejora considerable en el tiempo de batería de los dispositivos.
  • LTE Dual: Esto es, que a priori Ubuntu Edge funcionaría con la llamada LTE (recordar que no es más que un 3,99G) tanto para América como para Europa.
  • Arranque dual Android-Ubuntu Phone OS: Toda una verdadera declaración de intenciones, que además asegura una entrada potente en el mercado de las apps (y por tanto del consumidor final).
  • Pantalla de zafiro puro: ¿Algo más que añadir?

A esto unirle que la forma de lanzarlo es mediante indiegogo (EN), una de las plataformas de crowdfunding más conocidas para los geeks, y que pretende levantar 32 millones de dólares, lo que lo transforma en el proyecto de crowdfunding más caro de la historia.

Dicho esto, varios puntos a tener en cuenta que me parecen considerablemente importantes:

  • Híbridos everywhere: Con esto quiero trasladaros esa tendencia del mercado a centralizar dispositivos bajo uno solo. Y es que considerando que cada vez se venden (o renuevan) más tablets y smartphones y menos PC, y que para el uso habitual que un usuario base le da a un ordenador, bastaría cualquier dispositivo móvil, queda patente que el camino a seguir es precisamente éste. Ubuntu Edge es un móvil con arranque dual, pero bastaría conectarle un monitor, y teclado y ratón por bluetooth para que pasase a ser un ordenador con Ubuntu Phone, que en la práctica ofrece todo lo necesario para el usuario de a pie ¿Os imagináis ese futuro en el que tu smartphone es además centro multimedia del hogar? Pues no imaginéis mucho, porque por ahí van los tiros.
  • Crowdfunding como laboratorio de nuevas tecnologías: El segundo punto candente del día. De plataformas anticrisis, a herramientas para medir la eficacia en materia de ventas de un nuevo proyecto. Esos 32 millones de dólares que Canonical pretende levantar (y no dudo que lo consiga) no van destinados a sacar esa primera serie de 40.000 unidades. Al menos no al completo. Hablamos de un colchón que permite a inversores de la empresa dormir tranquilos por la noche a sabiendas que si todo sale mal, no será a costa de su dinero (únicamente). Y es que en este terminal estamos hablando de unificar dos mundos aún muy separados (PC y móvil), de utilizar varias tecnologías (véase el LTE dual, o la batería) aún en la sombra, y porque no, de abrir un mercado que hasta ahora parecía impensable (el simple hecho de que venga con 128GB de memoria SSD es un atractivo de valor incalculable).

Habrá que seguir con entusiasmo la propuesta (frente a las palabras de mi compañero, un servidor no es reacio a pensar que acaben por obtener esos millones que piden), ya no solo por el terminal en sí (habrá que ver como mantienen las dimensiones incluyendo toda esa carrocería interna), sino por la lectura que ofrece, y que puede marcar un antes y un después en el modelo de evolución de las nuevas tecnologías.


Ya no hablamos de que particulares acaben por donar 32 millones de dólares, sino que ahí estarán grupos de investigación privados que participan con la tecnología innovadora del producto, y tienen un claro interés de que salga a la luz (inversión a medio plazo). Hablamos de compañías e inversores cuyos nombres quieren que aparezcan referenciados en un dispositivo de este tipo (recordemos que Canonical aún sigue teniendo connotaciones de empresa modelo, de open source y de estar al frente del cañón). Y para terminar, también hablamos de la competencia, que apoyando con apenas una donación mínima, estaría favoreciendo la salida al mercado de un producto piloto, de tal manera que si al final triunfa, bastaría con reproducirlo en sus propias plataformas y acaparar el mercado nuevamente.

Edit a día 22 de Agosto del 2013: Se cumplió el mes de la campaña, y la recaudación asciende a poco más de 12 millones, un éxito desde el punto de vista del crowdfunding, un éxito desde el punto de vista de la publicidad para Ubuntu, pero insuficiente para sacarlo adelante. Como ya dije, un banco de pruebas para saber si había interés real en un dispositivo de estas características.