Leía en Alt1400 (ES) el caso de éxito de Classcraft (EN), una suerte de método educativo desarrollado por Shawn Young, profesor de física, junto con su padre y hermano, y que propone aplicar fundamentos de los juegos de rol a las clases.
Así, cada alumno decide el primer día el rol que tomará según su manera de ser. Cada clase tiene varias habilidades (por ejemplo, el mago puede «parar el tiempo«, lo que le permitiría entregar el examen cuando todos ya lo han entregado, o «hacerse inivisible«, una skill altamente recomendable para aquellos que prefieran tener un margen de 2 minutos para entrar después del toque de campana. Una de las habilidades del guerrero, «cazar«, le permite por ejemplo comer en el aula.
Por supuesto, cada clase tiene unos puntos de vida, que irá perdiendo según cometa errores (fallos en las preguntas del profesor, molestar en clase,…), lo que puede llevar a un alumno a perder todas sus vidas y tirar «el dado de la muerte«, que marcará una penalización (copiarse un tema entero, quedarse castigado una tarde,…).
Para usar sus habilidades, necesita además Puntos de Poder, que se obtienen cada 1000 puntos de habilidad. Y para conseguir estos últimos, hay que hacer las cosas bien: responder correctamente, ser proactivo en el aula, encontrar errores en apuntes,…
El resultado final es un modelo de aprendizaje basado en estímulos positivos, en el que los alumnos se sienten parte del sistema, y disfrutan mejorando. Pequeñas concesiones como las arriba mencionadas, o la del sanador de escuchar música, favorecen la búsqueda de puntos de habilidad sin afectar al estudio en sí, generando un ecosistema mucho más proclive a la enseñanza.
- Sistema de riesgos y recompensas enfocados a aumentar la motivación del alumno.
- Enseñar mediante el juego, y no bajo estándares de obligatoriedad o el temor al fracaso.
- Colaboración y trabajo en equipo, favoreciendo la competencia positiva, frente a la negativa tradicional de la mayoría de sistemas educativos.
- Educación aumentada (la educación pasa a ser una actividad de la que se habla también fuera de las aulas).
Una opción que bien me hubiera gustado haberla disfrutado en mis días de colegio, y que sin duda, me gustaría ver aplicada el día de mañana. Un ejemplo de que en este sector todavía hay mucho espacio para la innovación.
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