Convergencia… ¿Le suena de algo?
Por estos lares he escrito ya algo más de 60 artículos referentes a ese paradigma que lleva años sobre la mesa, y que parece más esquivo que lo que cabría esperar. La idea de que podamos tener un dispositivo móvil que, una vez conectado a una pantalla, un teclado y un ratón, se vuelva de facto un dispositivo de escritorio, adaptándose a las necesidades de uno u otro entorno según petición del usuario.
Canonical fue de las primeras grandes compañías en pegar un puñetazo en la mesa y presentar Ubuntu For Phones, un proyecto del cual fuí ambassador durante un par de años, y que lamentablemente acabó en saco roto.
Google, Apple, Mozilla… cada uno lo intentó a su manera, e incluso hubo algunos acercamientos inesperados verdaderamente brillantes como fue el caso de Remix OS, que analicé por estos lares, y que me sirvió para descubrir algo que hasta el momento se me había escapado: lo mismo la convergencia debía venir del móvil al escritorio, y no al revés.
Desde entonces, Nintendo ha hecho suyo este principio en el sector de las videoconsolas, grandes fabricantes de la talla de Samsung apuntan con desarrollos propios que no pintan nada mal, y hasta la inamovible Apple parece interesada en ofrecer sino una convergencia real, al menos una experiencia cercana al escritorio con los iPads Pro.
Pero actualmente hay una única compañía que tiene en su haber lo más cercano que podríamos desear al paradigma de la convergencia, y esa es Microsoft.
Windows 10 Mobile es el culmen de esa filosofía Mobile First de la que los de Redmond hacen gala desde hace ya unos cuantos años. Y tengo miedo que aunque a nivel de propuesta, como comentaremos a continuación, creo que es todo un acierto, llegue demasiado tarde, con “todo el pescao vendío” entre el duopolio Andriod/iOS.
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El HP Elite X3 como smartphone
A principios de Junio los chicos de HP España me enviaron el HP Elite X3, un smartphone de gama alta en el que corre Windows 10 Mobile, y que desde entonces se ha vuelto mi smartpone principal.
A nivel puramente de hardware, y por resumir (tiene todas sus características técnicas en la store de HP (ES)), decir que estamos ante un terminal de gran tamaño (pantalla AMOLED de 5,86 pulgadas a resolución QHD), con un Snapdragon 820 (ya sabe, 2,15 GHz y 4 núcleos), 4GBs de RAM, 64GBs de almacenamiento, protección IP67 (salpicaduras de agua y polvo), cámara trasera FHD de 16MP y delantera de 8. Ranuras para dos nano SIM, para una microSD de hasta 2 TBs (sí, 2 malditos TBs), y lector de huellas dactilar, con los altavoces B&O, por cierto, en el panel delantero, lo cual junto a su tremenda pantalla y a los tres altavoces de cancelación de ruido, anima a utilizarlo como dispositivo multimedia.
Para mi gusto un terminal demasiado grande. Me ha costado acostumbrarme a utilizarlo con una sola mano. Pero claro, cierto es que desde aquel Galaxy Note 2 he ido paulatinamente apostando por dispositivos más comedidos hasta mi actual Xiaomi Mi5, que al lado de este, casi parece un juguete :).
Eso sí, si hay algo que hay que aplaudir a los chicos de HP es la autonomía que tiene el HP Elite X3: 4150 mAh. Incluso en jornadas verdaderamente intensas, tirando de tethering en itinerancia para dar conectividad a otros dispositivos ha llegado a durarme perfectamente todo el día. En jornadas normales perfectamente podía cargarlo cada dos días sin miedo a quedarme sin batería. Algo bueno debería tener un terminal tan grande…
A nivel de software, decir que pasar de Android a Windows 10 Mobile no ha estado carente de problemas, aunque bien es verdad que la culpa no es en este caso de Microsoft, sino más bien de la sincronización de la cuenta de Google y de las rutinas a las que nos tiene acostumbrados Android.
- La sincronización de contactos de Google: Estuve los primeros dos días dándole vueltas al porqué pese a que tenía sincronizada la cuenta de GMail, solo me pasaban unos pocos contactos. Más tarde me di cuenta que el problema venía porque en Google tengo categorizados los contactos en diferentes apartados, y al parecer la API de sincronización de Google solo permite acceder a aquellos que no están metidos en una categoría… Después de probar varias veces a borrar cuenta, eliminar contactos e intentar que se volvieran a sincronizarse correctamente, decidí exportar manualmente yo los contactos y sincronizarlos con la cuenta de Outlook.
- Gestión agrupada de notificaciones: Esto ya es para nota. Quien escribe estas palabras es un maníaco de las notificaciones. Mi teléfono solo quiero que suene cuando toca la alarma, solo quiero que vibre cuando me llaman, solo quiero que me muestre notificación visual cuando me llega un SMS o un mensaje en un servicio de mensajería, y no quiero que me alerte cuando alguien me menciona, le da Me Gusta, RT o lo que diablos sea en la red social o aplicación de turno. Y esto entra en conflicto con el sistema de notificaciones que ofrecen aplicaciones como Twitter (los MPs si quiero que me los notifique, pero no con vibración, mientras que el resto sin nada). En Android tengo maneras de forzar desde la interfaz todo esto, pero en Windows 10 Phone estoy sujeto a los designios de cada aplicación, que hace y deshace a su antojo.
- Funcionalidades extra de mis gadgets: Esto es un tema curioso. Un servidor utiliza habitualmente unos cascos Motorola bluetooth que ofrecen vibración (perfecto para enterarme cuando me llaman) y la Xiaomi Mi Band 2, que en Android tengo definido que únicamente me alerte cuando hay llamada entrante. Pues en Windows 10 Mobile no he conseguido que los cascos vibren bajo ninguna circunstancia (un problema menor, ya que lo importante, que es poder coger llamada y controlar volumen, se hace sin problemas), pero es que con la Xiaomi a veces me avisa, a veces no. Da igual que esté más o menos cerca, parece que funciona cuando quiere. Y sé que el problema vendrá seguramente de que quien gestiona esa sincronización no es una app oficial, sino una creada por un tercero, quizás con unos permisos limitados, y que por ende falla más que una escopeta de perdigones.
Por lo demás, me esperaba sinceramente mayores dramas.
- Redes sociales y servicios de mensajería: La única que he echado de menos ha sido LinkedIn, un servicio al cual puedo entrar perfectamente vía web. Tanto WhatsApp, como Telegram, como Messenger, y sus respectivas redes sociales, ofrecen una aplicación como mínimo a la altura de las presentes en Android o iOS.
- Correo: Outlook permite sincronizar diferentes cuentas, así que no he tenido problema alguno en este sentido más allá del obvio (todos los filtros que tengo definidos en GMail no se verán reflejados en Outlook). Por sacarle la puntilla, Outlook nos permite unificar bandejas de entrada para no tener que revisar por separado cada correo, pero he echado en falta que también me permitiera definir una de esas bandejas como la principal, que es como suelo trabajar yo desde GMail. Entiendo, no obstante, que es más un problema de API que otra cosa.
- Mapas: No tenemos Google Maps oficial (hay desarrollos de terceros, pero cualquiera mete ahí la contraseña…), así que dependemos de los de Bing, que diría que están… al nivel de los de Apple :).
- Edge como navegador por defecto: Si ya en escritorio me parecía una alternativa más que solvente, en móviles me ha encantado. Muy rápido, con bloqueo de publicidad y tracking automático, gestión de pestañas… Vamos, todo lo que se podría pedir.
- Podcast, Feeds RSS, streaming de contenido, música: Windows 10 Mobile cuenta con prácticamente cualquier aplicación de las tradicionales. Tenemos Netflix, tenemos Spotify, tenemos Plex, tenemos Steam, Dropbox, Twitch… y por supuesto todas las propias de Microsoft (suite Office, Skype, OneDrive…). Además, he estado utilizando algunas de desarrollos de terceros como la anteriormente comentada de gestión de la pulsera Xiaomi (Bind Mi Band), un lector de feeds RSS muy completo (FeedLab) y un podcaster (i Podcast). También he estado utilizando Perfect Music y VLC para consumir contenido audiovisual en local, ya que me gustaba más que la nativa (Groove Música).
El corolario final con el que me quedo es que Windows 10 Mobile tiene todo lo que uno necesitaría en un smartphone, pese a que en efecto la tienda de aplicaciones está a años luz, tanto en contenido como en calidad, si la comparamos con las de Google y Apple.
Y además, tiene algunas ventajas, como es el hecho de que por fin he podido probar Windows Hello completamente, tanto con el lector de huellas (me ha costado acostumbrarme a que esté detrás y no debajo de la pantalla) como con el reconocimiento facial, que aunque funciona bien, creo que en móviles, y sobre todo en verano (por las gafas de sol), no se presta tanto como el primero. Mejor para mi, que así no tengo que actualizar el ranking de sistemas de seguridad a elegir :).
Lo de la suite Office merece mención aparte. Considerando que este dispositivo está destinado a perfiles eminentemente profesionales, el contar con un Excel o un PowerPoint completo (no un simple lector de documentos) es toda una delicia, y me recordó mucho a esa época en la que Blackberry era dueña y señora del sector corporativo. En Android no es la primera vez que tengo que esperar a llegar a casa para revisar un documento que me han enviado. Con Windows 10 Mobile lo he podido realizar desde cualquier lugar y adaptado al tamaño de pantalla e interacción táctil que ofrece el smartphone.
El HP Elite X3 como un ordenador de escritorio
Hasta aquí todo lo esperable en un smartphone, ¿verdad?
Pero lo cierto es que el HP Elite X3 se guarda un as en la manga: Continuum.
Basta con conectarlo a uno de los docks, o mediante conexión inalámbrica a una pantalla y teclado, para poder trabajar con una suerte de Windows 10 Mobile adaptado a entornos de escritorio.
La pantalla principal del smartphone pasa a estar en el ya clásico menú de Inicio, y en la barra de tareas se irán colocando las aplicaciones que tenemos abiertas junto a los botones de volver atrás, abrir los distintos escritorios o Cortana.
En el margen inferior derecho tendremos un acceso al centro de control y notificaciones, y en el superior izquierdo, el resto de iconos de estado (WiFi, cobertura, bluetooth…).
El móvil se transforma entonces en una suerte de panel táctil, por si no tenemos a mano un ratón, con la opción también de abrir el teclado digital (por si tampoco tenemos teclado físico), aunque puede utilizándose como smartphone mientras tanto. No hablamos por tanto de un mirroring a secas. Una vez conectado cada entorno opera de forma aislada, compartiendo recursos y notificaciones.
El resultado es un sistema que recuerda mucho a la experiencia Windows 10, y que hereda parte de sus atajos de teclado y características de productividad. Sin embargo, sí hay varias cosas que he echado de menos para que en efecto pueda decir que se trabaja al mismo nivel que con un ordenador. Para empezar:
- Acercando el ratón al margen superior derecho de la pantalla aparecerán, como muestro en la figura anterior, la opción de minimizar o cerrar la aplicación. En cambio, no he encontrado la manera de trabajar a doble pantalla, teniendo que recurrir continuamente a cambiar entre apps bien sea desde el administrador de escritorios, bien sea desde los acceso directos de la barra de tareas. Quizás sea yo que no he dado con la tecla adecuada, pero esto me parece crítico para el buen desempeño productivo en grandes pantallas.
- La resolución: Aquí es posible que la culpa sea por las dimensiones extrañas que tiene mi pantalla de escritorio (una ultrapanorámica). La resolución que me muestra es inferior a la esperable, lo que hace ligeramente más molesto el trabajo. Es un efecto visual, pero en todo caso me parece digno de mencionar.
A favor, eso sí, he de decir que es de lo más cercano que he probado a esa idea de convergencia móvil-escritorio. Remix OS ya apuntaba maneras, pero es que aquí estamos ante un Windows, algo mucho más cercano a la experiencia que muchos hemos experimentado en escritorio prácticamente durante toda nuestra vida. Con un solo dispositivo tengo la experiencia móvil y un acercamiento a la experiencia escritorio, que podría servir de sobra para todos aquellos perfiles profesionales que se alimentan básicamente de servicios web y ofimática.
No tengo ya claro que un programador o un diseñador pueda desempeñar su trabajo en igualdad de comodidad, pero es que tenemos que darnos cuenta que el grueso de la sociedad tiene necesidades tecnológicas muchísimo más limitadas que las nuestras. Y que por ende, de cubrir necesidades, primero se van a cubrir las que demandan la mayoría, no los cuatro techies que estamos por estos lares.
En mi caso he estado probando la experiencia de escritorio mediante el dock oficial de HP. Un dispositivo que permite conectar vía DisplayPort el smartphone mientras éste se carga, y además, conectarle cable de red, y hasta tres dispositivos con 2 USB y un USB de tipo C.
La principal ventaja de esto es que de pronto he podido despejar casi por completo el escritorio, al no necesitar tener el portátil abierto delante mía, y tener el teclado conectado por bluetooth.
Decía que Continuum se puede activar mediante conexión física, bien sea con dock, bien sea con el Lap Dock de HP, o mediante conexión inalámbrica.
El Lap Dock (ES) no lo he podido probar, pero básicamente estamos ante un portátil sin la parte inteligente. Algo parecido a lo que en su día analice de parte de Alcatel. Una pantalla unida a un teclado y un touchpad, pero falto de la parte de procesamiento, que es lo que ofrece el propio smartphone cuando hacemos el paring.
Respecto a la conexión inalámbrica, mi pantalla no permite realizarla, pero el funcionamiento es el que cabría esperar. Conectas y empiezas a utilizarlo como escritorio. Cuando quieras desincronizarlo, simplemente lo desconectas y listo.
Entiendo que también es posible conectar la pantalla directamente mediante algún adaptador DisplayPort/USB de tipo C, a sabiendas que con ello perdemos la opción de conectarle otros dispositivos físicamente. Pero considerando el factor económico (el dock, que es el más barato de los dos complementos, sube el precio casi 100 euros) quizás sea un punto a considerar.
Conclusiones
La experiencia ha sido muy gratificante, aunque sigue siendo algo limitada. Para mi trabajo el HP Elite X3 no es suficiente. Pero de nuevo recalco que soy consciente de que no todo el mundo necesita sacarle tanto provecho a la tecnología como le pasa a aquellos que nos dedicamos a la propia industria tecnológica.
Si usted es estudiante, trabaja en marketing, en administración o tiene un perfil de directivo, quizás prefiera sacrificar algunos de los puntos competitivos de un portátil por tener un único dispositivo multiuso. Y en ese caso, por flexibilidad, por comodidad, y por pragmatismo, lo mismo el HP Elite X3 es la opción que andaba buscando.
Puntos positivos
- Todo en uno: La experiencia que me llevo de todo este tiempo utilizándolo como dispositivo principal es que en efecto puede ser un sustituto del resto de dispositivos. No está al mismo nivel que un ordenador de escritorio, pero simplemente funciona. Muy útil sobre todo para profesionales que tengan que viajar mucho, o que dependan casi exclusivamente de servicios webs y ofimática.
- Como smartphone: Windows 10 mobile ya corría bien en móviles de gama baja, así que era de esperar que fuera como un rayo con terminales de gama alta. Estamos ante un smartphone grande (6 pulgadas de pantalla), con una batería que aún con un uso exigente tranquilamente nos puede durar un par de días.
- Como ordenador de trabajo: Las versiones de Office para móviles rivalizan en prestaciones con las de escritorio, por lo que todos aquellos de perfil directivo/administrativo pueden perfectamente desempeñar su trabajo sin mayores dramas, con la comodidad incluida de llevar tan solo un dispositivo.
Puntos negativos
- Ecosistema de aplicaciones: El gran hándicap que tiene Windows 10 Mobile es la falta de un ecosistema tan potente de desarrollos de terceros como sí tiene Google Play y la App Store. Sin embargo, he de reconocer que no he echado en falta ninguna de las core de mi día a día. Siempre hay disponible alternativas, aunque no tantas como me gustaría y en algunos casos no oficiales.
- Experiencia como ordenador de trabajo: El que no tengas maneras (o al menos yo no las he encontrado) de trabajar a doble pantalla me parece un problema que le resta productividad. Cierto es que tenemos la gestión de escritorios y pestañas, pero echaba en falta esto, sobre todo para los que como un servidor trabajamos con una pantalla ultrapanorámica.
Estos días el HP Elite X3 está rebajado un 21%, y si lo queremos junto con el dock está con una rebaja del 14% en el market de HP (761,09€ con dock, 664,29€ sin él), por lo que no sería mal momento para hacerse con uno.
¿Me he dejado algo? Por aquí me tiene para resolver cualquier duda.
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Solo una cosa como usuario Windows 10 Mobile: el problema que comentas de la gestión de notificaciones no existe, se pueden activar y desactivar las de cada aplicación de forma individual!
Es lo que comentaba. Hay que hacerlo app app. Y no pasa nada, simplemente es un trabajo extra a considerar.