Open source
Ayer fue un día emotivo para aquellos que vivimos en mayor o menor medida del open source, y es que WordPress, uno de los CMS más extendidos a nivel mundial, celebraba su 10º aniversario (EN).
En la gran mayoría de grandes ciudades de todo el mundo se organizaron eventos de apoyo a la comunidad OpenSource. Un servidor estuvo en la de Madrid (la más grande de España, con el permiso de Barcelona), y que tuvo como sede las oficinas (mejor dicho, la terraza) de OpenSistemas. Un encuentro de aficionados y profesionales, con picoteo y cerveceo incluído, y que demostraba una vez más esa tendencia que vengo observando desde hace unos pocos años al apoyo del software libre y su implantación frente al propietario.
Tuve la suerte de poder charlar con Javier Sotomayor (@opensistemas), COO de OpenSistemas, que me mostró desde dentro cómo una mediana empresa puede ser sensible a la necesidad de liberar código y favorecer a la comunidad. Con Francisco de Juan (@fjuan), developer de profesión, y administrador del blog RecetasDeMama (ES), uno de los 10 más importantes de habla hispana en el sector. Con Sergio Hernández (+Sergio), otro profesional de la gastronomía que quiere dar el salto de Blogger a WordPress, y muchísimos más.
Y es que el software libre une, y es un tipo de producto que aunque no lo sepas, seguramente sea más que trascendental en tu vida (¿cuántos de los servicios que usas a diario NO están desarrollados a partir de protocolos o licencias OpenSource?).
WordPress nacía por allá en el año 2003, como parte de un proyecto de los ingenieros Matt Mullenweg y Mike Little, y partiendo de una plataforma para bloggers como fue en su momento “b2/Cafelog“. Se liberó bajo la licencia GPL, lo que significa que estás en todo tu derecho de utilizarla y modificarla a tu gusto.
La principal característica de WordPress, y que le ha hecho acabar por ser uno de los productos OpenSource más importantes de la historia, es su facilidad de uso. WP está diseñado para que cualquiera, sea techie o no, pueda instalarlo en un servidor y empezar a trabajar con él.
No es necesario saber programación, y debido a su caracter modular, se adapta al diseño de cualquier tipo de web, desde un blog, hasta páginas de comercio electrónico o e-learning. Todo ello sin picar código (al menos no es necesario), tirando de una comunidad que no duda en liberar sus plugins y themes para el disfrute del resto.
Más tarde se crearía WordPress.com (EN), que abstrae la capa de administración de WordPress a cambio de ofrecer un servicio donde tú eres editor. Aúna por tanto la inmediatez de Blogger o Medium con la versatilidad de Drupal o Joomla, siendo para colmo amigable con el SEO ¿Qué más se puede pedir?
Del encuentro, me voy sobre todo con la conciencia tranquila de ver que la sociedad va poco a poco concienciándose de la importancia de apoyar proyectos de este cáliz, que no hacen más que permitir la evolución de Internet hasta el ecosistema multidisciplinar y abierto que es hoy (si los continuos ataques a la privacidad y censura no acaban por mermarlo). Porque para apoyar al software propietario ya están otros.
Ahora falta que este sentimiento que ya está en las calles llegue a gobiernos e instituciones, que venden su alma al diablo a cambio de licencias y contratos de tú a tú con las grandes corporaciones, hipotecando el futuro de sus servicios (y ya de paso de nuestro dinero).