La vida de un freelance no siempre es sencilla, y seguramente muchos de los que habéis decidido emprender vuestro propio camino os habréis dado en las narices con algún que otro cliente sin escrúpulos.
De todo se aprende, y es por ello que la mayoría de vosotros tendréis ya unas cuantas “medidas” para paliar las posibles consecuencias de un cliente que muchas veces no sabe lo que quiere, o sabe únicamente lo que no quiere, o cambia continuamente de idea, o acaba por abandonarte sin haber pagado. Para ello, los chicos de TopDesignSchool han diseñado esta infografía, cuyo principal atractivo son las recomendaciones que nos ayudarán a evitar casos como los anteriores. A saber:
- Cobrar siempre un 50% antes de comenzar el proyecto.
- Firmar siempre un contrato con las fechas, los pre-requisitos y el dinero.
- Enviar los diseños iniciales al cliente antes de empezar con la maquetación.
- En caso de que el cliente ofrezca varios proyectos que le han gustado, pedirle que te marque qué le ha gustado de cada uno.
- Saber también las partes de otros proyectos que no le han gustado.
- Ofrecerle de antemano varios tipos de maquetación diferente, y que elija antes de ponerse a desarrollar.
- Una vez que el cliente ha dado el visto bueno al diseño, firmar un segundo contrato actualizando los requisitos finales tal y como se han planteado.
- Mantener siempre en tu propio servidor el trabajo hasta que hayas cobrado todo el dinero.
Os dejo con la infografía, que no tiene desperdicio: