A tener en cuenta ArkOS (EN), un SO que bebe directamente de Linux, creado por un joven de 23 años, en plena fase de crowdfunding desde la propia web (EN), y desarrollado con el objetivo de democratizar los servidores web.

arkos

Enrique (ES) hace un análisis al respecto (y aunque acertado, me da que no ha profundizado lo suficiente), y por Xataka, JaviPas (ES) habla de sus prestaciones. Lo cierto es que la idea no es nueva, pero sí quizás parte de la premisa de encontrarnos actualmente en el punto de inflexión necesario para vaticinar una futura red descentralizada, que echa por tierra la tendencia a justamente lo contrario.

Lo que me ha llamado la atención de ArkOS, no es el hecho de poder montar un servidor casero con una Raspberry Pi, ni un correo, ni una web. El verdadero potencial de ArkOS reside en Genesis, esa plataforma open source que ha montado alrededor de la idea de descentralización, totalmente visual y que se acerca al panel administrativo de servidores tradicionales como webmin.

Y creo que es así por la simple escalabilidad del proyecto, una suerte de navaja suiza utilizable para cualquier usuario (incluso los no técnicos), apoyada en la bajada de los precios del hardware, en las mejoras de las conexiones caseras, y en el valor incuestionable de la usabilidad.

Porque estamos ante algo dirigido al hogar (albergar todos nuestros archivos, todos nuestros chats, todos nuestros emails a buen recaudo en nuestros servidores), pero es perfectamente extrapolable a grandes centros de datos. Una web igualitaria, que pondría las cosas difíciles a esos gobiernos interesados en romper nuestra privacidad. Una web alejada de las inclemencias y vaivenes de la compañía de turno. Una web como un organismo autoabastecido, imposible de silenciar y altamente replicable.