Hace algunas semanas hablábamos de la historia tipográfica de Apple.

Hace escasos días de la historia gráfica de Microsoft, y hoy vuelvo a sacar el viejo Libro Gordo de Petete para hablaros de otra historia, esta vez de ninguna empresa, sino de un símbolo que ha acompañado a la raza humana durante siglos, y cobra  una importancia desmedida en la era informática. Estamos hablando, como no, de la @ (arroba).

Desde el correo electrónico, a los usuarios de Twitter, pasando por infinidad  de usos, la arroba es ahora un símbolo obligatorio en cualquier teclado. Pero su historia comienza hace mucho tiempo, exactamente de principios del primer milenio.

Hay varios estudios en referencia a la arroba. Algunos, aseguran que podría tratarse de un diminutivo de «ad», palabra latina, usado por los monjes medievales para acortar el tiempo y trabajo al copiar los manuscritos. Por ello, la «d» se hubiera alargado y entrelazado con la «a», formando nuestra querida @.

Sin embargo, la versión más difundida apunta a los franceses y su palabra «á», que significa «en», y que casa con el significado que se suele dar a la @ actualmente.

Escrito de 1400 donde aparece un símbolo bastante parecido a la @

El primer vestigio del uso de la @ como tal data de 1535, donde Francisco Lapi, un mercader de Florencia, la usa para referirse a las unidades de vino. Mas tarde empezó a usarse como intersección entre un producto y su precio, de modo que «cuatro botellas de vino a un precio de 12 centavos» quedaba escrito «12 botellas de vino @ 12 ctvs».

Primer vestigio del uso de la @ en mercado

Con la llegada de la imprenta, este símbolo se perdió en el olvido, recuperado en el 1971 por Ray Tomlinson, que intentaba encontrar el medio para que las personas pudieran comunicarse digitalmente entre sí. Por aquellos entonces, la única manera era mediante la línea telefónica, que además de ser engorroso, no permitía portabilidad alguna.

Ray Tomlinson, uno de los trabajadores de BBN Technologies, trabajó en el nacimiento de Arpanet, la red que actualmente llamamos Internet, e intentó encontrar una solución al problema de un ordenador con una red telefónica usado por varios usuarios (algo muy común). Además, debía contar con algún símbolo que no perteneciera al cómputo de los programas, ni fuera usado por los usuarios al referirse a ellos.

La inspiración le vino de golpe, el símbolo @ se encontraba justo sobre la P en su teletipo Modelo 33.

Estaba buscando un símbolo que no fuera muy utilizado…

…No había muchas opciones –un signo de exclamación o una coma. Pude haber utilizado un símbolo así, pero eso no hubiera tenido mucho sentido.

A Tomlinson le debemos el primer email, que por otra parte tuvo una distribución bastante semejante a la actual, con la @ en el medio.

De aquí, al uso común de la @ en el medio social, y su distribución y estandarización en los teclados de todo el mundo.