Humble Bundle.

Una de las iniciativas relacionadas con el mundo del videojuego que más me ha llamado la atención estos últimos años, decidía esta semana abrir su nueva tienda Humble Store (EN), donde el usuario puede comprar a un precio fijo el producto.


Shut-up-and-take-my-money

La noticia de por sí no parece llamativa, pero me sirve de ejemplo para ratificarme en la trascendencia de la intermediación en el tercer entorno, así como el valor adicional de un modelo de negocio basado en la economía social, dos tendencias cada vez más en auge.

Respecto a la primera, creo que queda patente que es un must have en el mundo de los servicios. La intermediación no es más que el ofrecimiento de productos dirigidos a un cliente que a cada paso es más prosumidor, y que por otro lado, no quiere perder el tiempo en acciones lentas y pesadas. Así es como vemos a gigantes de la intermediación como Amazon (el cual pone en contacto vendedores con compradores), Google (el nexo de unión entre webs y usuarios) o Facebook (la plataforma de comunicación entre conocidos), siendo a su vez gigantes del mercado.

Hablar de economía social, y no hablar de Humble Bundle, me parece un despropósito. Si atenemos a su forma de financiación tradicional (obviando en un principio esta nueva Store), nos encontramos con un sistema en el que el usuario compra packs de juegos a un precio muy inferior del valor real del mercado, mediante una donación (el precio no está fijado). Como gancho, si pagas más de la mitad de la media de donaciones de los usuarios anteriores, además te llevas un par de juegos extra (lo cual acaba por aumentar paulatinamente el precio de los packs, evitando así ese comprador que pone un dolar por defecto). Y para colmo, eres tú quien decide cómo se repartirá ese dinero, eligiendo en una tabla qué porcentaje irá a parar a los desarrolladores, qué porcentaje a Humble Bundle, y qué porcentaje a la ONG u organización de cada campaña. Pagando alrededor de un 95% menos del precio de estos packs, se ha demostrado que en ocasiones se han llegado a superar el 5000% de beneficio. Para que luego digan que el sector está en crisis

Por su parte, y obviando el hecho de que Humble Bundle no es más que una plataforma que democratiza la compra de un bien (a fin de cuentas, Humble Bundle es un comercio electrónico de juegos; ni ellos los hacen, ni siquiera ellos ofrecen el producto final), lo curioso del caso es que de por sí no deja de ser otro intermediario entre plataformas digitales de juego (Steam y Origin, principalmente). Lo que compras en Humble Bundle no es el juego, sino una key para activarlo en otra plataforma. Intermediación en su estado más puro.

Ahora veo que se embarcan en una Store propia (que de nuevo, solo “vende” keys para otras plataformas), por lo que podría pensarse que entra en el mercado de Valve. Y en parte podría ser, ya que aunque el usuario es vago por naturaleza, y resulta más cómodo entrar en Steam y comprarte el juego, Humble Store ofrece ese punto social que quizás algunos valoren (ver cuándo de lo que pago llega en verdad a los desarrolladores, o saber que además estoy donando parte de ese dinero a una organización social), y a precios por lo general más bajos (más altos en todo caso a las campañas que nos tienen acostumbrados, y que seguirán presentes cada semana).