Xbos Game Pass

Ya han pasado un par de semanas desde que tengo la Xbox Series X por casa, y desde entonces muchos me habéis preguntado que si os recomendaría comprar la PS5 o la Xbox Series S/X.

En cada caso os he respondido con un «depende». Si algo tiene de bueno la nueva generación, es que realmente cualquier opción va a ser un acierto. Ambas consolas ofrecen una experiencia a la altura de lo esperado, con un catálogo de lanzamiento semejo (como ya expliqué, muy pobre), pero con la posibilidad de disfrutar del catálogo de la anterior generación (en PS5) o de todo el catálogo de Xbox desde sus inicios (bendita retrocompatiblidad de Microsoft), y con algunas ligeras diferencias que te pueden hacer decantarte por una u otra.

Un tema del que ya profundicé en aquel artículo titulado: «PS5, Xbox o PC: ¿qué me compro?«, y que se puede resumir en:

  • PlayStation 5: En líneas generales, ha apostado por innovar, sobre todo en el mando (un prodigio tecnológico, aunque lamentablemente y quitando la demo y algún juego first party que por contrato se fuerce a utilizar dicha tecnología, seguro que acabará en saco roto, como le ha pasado a Nintendo con sus mandos), cuenta con una comunidad mayor (probablemente tengas más conocidos que tienen una PS que una Xbox) y su principal punto fuerte son los exclusivos (1 o 2 títulos al año que solo podrás jugar si tienes la Play, y que suelen ser de los mejores juegos de la generación).
  • Xbox Series: Ligeramente más potente (apenas se va a notar en el día a día), mucho más continuista (el mando como ya expliqué en el unboxing es casi igual que el anterior, pero es que el mando de la Xbox One ya estaba entre los mejores controladores de juegos que existen), y con su principal punto fuerte, que vuelve a ser ese «Netflix de los videojuegos» llamado Game Pass.

Que no sé si he hablado alguna vez por aquí del Game Pass… Quizás alguna :).

El caso es que si Game Pass para PC ya me tenía encantado, el Game Pass Ultimate (el que incluye todas las suscripciones de Microsoft para juegos) me ha enamorado.

Hay algo mágico en eso de comprar una consola nueva, conectarla, y ya, de golpe, tener acceso a cerca de 300 juegos de muchísima calidad, pudiendo seguir con mi partida donde la tenía en PC.

En la imagen que acompaña este artículo puedes ver un pantallazo de los títulos que tengo instalados en el disco duro de la consola. Hay mucho indie, más que nada porque a un servidor le pirran estos juegos, pero tengo por ahí una lista de títulos incluidos en el Game Pass que quiero jugar, y la lista ya tiene alrededor de 60 juegos, varios de ellos Triple A.

Para colmo con la llegada de los juegos de EA (FIFA, Madden NFL, NBA, Assasin’s Creed, Star Wars…) al Game Pass, y con el añadido de varios juegos más al mes, le propuesta es aún mejor. El típico perfil de jugador casual que quiere una consola para jugar al FIFA y poco más con la propuesta Xbox+Game Pass lo tiene más que cubierto.

Y todos, toditos, todos, por los escasos 100€ que me ha costado el Game Pass Ultimate durante 1 año. Que debo ser bastante pesado repitiendo esto, pero es que por lo que vale un juego de nueva generación de lanzamiento, tienes una suscripción durante un año que probablemente te va a permitir jugar a ese juego y además a todo el catálogo de Game Pass.

A un servidor que tampoco tiene todo el tiempo del mundo para disfrutar de los videojuegos, este claim le ha calado. Y creo que no voy a ser el único.

  • Para alguien que quiera jugar de vez en cuando, ahí tiene la Xbox Series S por 300 € (ES), que es perfecta para jugar en un monitor o televisor de 1080P, y una suscripción a Game Pass de, pongamos, una media de 100€ anuales. Con esto ya tiene una consola de nueva generación en la que durante los próximos 10 años va a poder disfrutar de todo lo que salga y todo lo que ya hay sin mayores complicaciones, como ocurre con el cine y las series con plataformas como Netflix: Sin tener que estar preocupándose de qué juegos salen, de pasarse por una tienda para pedirlos o de cuánto van a costar.
  • ¿Que tienes un televisor 4k? Pues por 200 € más tienes la Series X (ES), que viene además con lector de Blue-Ray (por si quieres comprar juegos de segunda mano). El resto es más de lo mismo.

Había además un tema que me preocupaba, y es que como expliqué yo por casa tengo una conexión 4G, es decir, una media de 10mbs de descarga, con picos de 18 y bajadas incluso a 2 o 3mbs.

Con este panorama, no tenía del todo claro si podría sumarme fácilmente a la descarga de juegos en digital, ya no solo porque los juegos actuales ocupan una barbaridad (la media de peso por juego triple A ronda los 50GBs, habiendo algunos que llegan a la friolera de 175 GBs), sino porque esa misma conexión es la que usamos tanto Èlia como un servidor para trabajar.

Es decir, que si voy a tener varios días la conexión a tope para descargar un juego… durante todo ese tiempo necesito también disponer de la conexión para trabajar, y ya si eso compatibilizarlo con algún rato de juego o consumo de contenido audiovisual.

¿Con qué me he encontrado? Pues con unos servidores y un hardware que hace magia. Y ojo, que hablo de Xbox porque es lo que tengo, pero me consta que con Play5 la experiencia es semejante.

Desde el martes 10 que me llegó la consola hasta el sábado he estado bajando estos 25 juegos que ves por aquí. Alrededor de 200GBs con una conexión 4G. Y mientras tanto, me ha sorprendido que hemos podido seguir conectados para trabajo y hobby sin problemas (unos cortes mínimos en alguna sesión de cine en streaming y poco más).

La consola, y ese Google WiFi que tenemos por casa, han hecho maravillas repartiendo el escaso ancho de banda con el que contamos. Y por cierto, que las descargas siguen funcionando en segundo plano mientras puedes disfrutar de cualquier juego sin que notes restricciones en potencia, tirones en los juegos o la máquina se caliente. Sencilla y llanamente la Xbox, que la tengo detrás del televisor de 65″, no se siente (la Play5 al parecer hace un poco de ruido por el ventilador, pero algo despreciable). Algo sobre todo muy importante si piensas utilizarla en la habitación donde duermes.

Por todo esto no me queda otra que recomendarla.

¿Que eres más de PS? Pues genial. Es una grandísima opción, y de seguro vas a disfrutar la PS5 muchísimo.

Pero si no quieres preocuparte, y prefieres acercarte a los videojuegos como ya haces al cine con Netflix y compañía, Xbox Series S (ya sabes, televisor 1080P) o Xbox Series X (televisor o monitor por encima de 2K) + Game Pass anual es tu opción.

Para disfrutar de juegos (únicamente en versión digital) en televisores y monitores 1080P

Para disfrutar de juegos en televisores o monitores 2k-4k-8k

La manera más económica (tiempo y dinero) de jugar actualmente


________

¿Quieres saber dónde conseguir juegos gratis periódicamente? Por aquí tienes un listado de servicios y eventos a marcar en tu calendario para no perderte ninguna de estas ofertas.

¿Quieres conocer cuáles son mis dispositivos de juego preferidos? Revisa mi setup (ES).

Y si te gustaría ver más de estos análisis por aquí. Si el contenido que realizo te sirve en tu día a día, piénsate si merece la pena invitarme a lo que vale un café, aunque sea digitalmente.

Banner negocios seguros